Esta es una receta de aprovechamiento y de temporada. Llega el frío y nos apetece tomar platos calientes, platos de cuchara y si encimas le añades las alcachofas el guiso que sale es espectacular. Es una receta sencilla aunque con un poco de elaboración. Necesitas algo de tiempo y que como todos los guisos de cuchara, siempre están mejor cuanto más reposen. Los ingredientes son fáciles de conseguir y las Carillas las puedes sustituir por la legumbre que más te guste o que tengas por casa.
INGREDIENTES (para 2 personas)
• 120 g de Carillas*
• 5 alcachofas
• Zumo de 1 limón
• 1 cebolla
• 1 diente de ajo
• 1 vaso de vino blanco
• 1,5 l de caldo de pollo o verduras
• 2 ramas de tomillo
• Aceite de Oliva Virgen Extra
• Sal
* Vale cualquier otro tipo de judía.
PREPARACIÓN
1. El día anterior ponemos en agua fría las carillas a remojo durante unas 12-16 horas.
2. Una vez que vamos a empezar a guisar pelamos las alcachofas eliminando las hojas exteriores hasta llegar a las más tiernas de color más amarillo, pelando el rabo de las alcachofas (puedes ayudarte de un pelador) y finalmente, eliminando la parte superior de la flor. Las cortamos en cuartos y las vamos echando a un bol con agua fría y zumo de limón para evitar que se pongan negras.
3. Ponemos en la olla que vayamos a utilizar para todo el guiso 3 cucharadas de aceite y dejamos que se temple. Escurrimos las alcachofas y las secamos para después freírlas, hasta que se doren un poco. Finalmente las reservamos para más adelante.
4. En la misma olla añadimos otras 3 cucharadas de aceite y sofreímos la cebolla picada en brunoise, a fuego medio bajo y removemos de forma casi constante para que no se queme durante unos 5-6 minutos hasta que veamos que empieza a cambiar de color. Entonces añadimos el ajo muy picado y el tomillo. Dejamos que se termine de hacer unos 3 minutos y entonces añadimos el vino blanco y dejamos que hierva hasta que reduzca dos terceras partes.
5. Añadimos el caldo (si no tienes tanto caldo de pollo ni de verduras puedes sustituir una parte por agua) y añadimos la legumbre. Dejamos hervir, en este caso, de 1,5 a 2 horas aproximadamente a fuego medio. Que hierva pero no demasiado. Lo mejor, ir probando para ver en qué punto se encuentran las legumbres. Vamos rectificando de sal poco a poco.
6. En los últimos 10 minutos de cocinado incorporamos al guiso las alcachofas que habíamos reservado en el paso 3.
7. Dejamos que reposen y listas para comer.
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