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Para llegar a PAMPIN BAR vas a necesitar sí o sí Google Maps o, al menos, para intentar no perderte. Prácticamente escondido en un recoveco de las calles del barrio de San Pedro de Santiago vas a encontrar una pequeña puerta de casa tradicional. Es ahí. Has llegado a ‘Pampín Bar’.

pampin bar galicia restaurante

‘Pampín Bar’, según cruzas su puerta cambia. Cambia a un lugar alegre, con mesas individuales y una un poco más alargada, buen ambiente y mucho ajetreo. En seguida nos atendieron y nos sentaron en nuestra mesa. A los mandos de los fogones de ‘Pampín Bar’ se encuentra Alén Tarrío, el que fuera nombrado como Cocinero del año 2019 en el Fórum Gastronómico A Coruña.

La reserva es obligatoria porque suele estar muy lleno. Es más, cuando nosotros estuvimos, además de estar lleno, había ya platos de fuera de carta que no les quedaban, como los pescados, así que, en parte, nuestro gozo en un pozo en ese aspecto.

QUÉ COMER EN PAMPÍN BAR

La carta de ‘Pampín Bar’ no es demasiado amplia, con lo que si llevas hambre y sois varios, casi, casi la podéis pedir entera. Es una carta pensada para compartir y probar un poco de todo, así que a nosotros nos encantó. En nuestro caso, pudimos disfrutar de la carta de Otoño, por lo que es probable que haya alguna modificación, pero la esencia de ‘Pampín Bar’ es la misma.

SALADOS

Empezamos con una Tabla de quesos. La propuesta era una combinación de diferentes quesos de Gorgonzola, Moluengo de Albacete, un Mahón elaborado por Nicolás Cardona, Ossau Iraty y, para terminar, un Montes de Alcalá de Cádiz. Una tabla de quesos es uno de nuestros entrantes favoritos para cualquier comida, así que, no nos pudimos resistir a pedir esta fantástica tabla. Además, si acompañas a la tabla con un poco del Pan de masa madre de ‘Pampín Bar’, la combinación es perfecta.

Después pasamos a unas porciones de su Empanada de Berberechos. Nos encantó. Eso sí, te tienen que gustar los berberechos porque no es que no se notaran, sino todo lo contrario. La masa estaba realmente buena y si nos llegan a poner la empanada entera, nos la habríamos comido sin dudarlo.

empanada gallega santiago

Además, en la barra la podías ver y es que desde que habíamos entrado, le habíamos echado el ojo. La empanada de maíz es uno de los iconos de ‘Pampín Bar’ y es casi un pecado no probarla. Súper crujiente la masa y más ligera que la tradicional.

Otro de los platos que pedimos fue los Mejillones en escabeche. Poco más se puede decir. Estaban exquisitos y el escabeche muy bueno, tanto que no nos pudimos resistir a mojar parte del pan.

mejillones escabeche santiago compostela

También pedimos el Paté casero. A nosotros personalmente nos gustó tanto de sabor como de textura. Se notaba que era casero y que nada tiene que ver con los clásicos patés que puedes encontrar en el mercado. Lo fuimos untando en el pan poco a poco. El paté combinado con las setas con las que estaba preparado nos gustó mucho.

pate casero tradicional gallego

Uno de los platos principales que elegimos fue el Steak tartar. Estuvimos dudando entre el steak tartar y el roast beef, pero el camarero, al que le preguntamos cuál nos recomendaba, nos dijo que el Steak Tartar de ‘Pampín Bar’ era uno de los más famosos de Santiago, así que con ese argumento, lo pedimos.

cocina casera santiago

Esta vez pedimos el steak tartar sin picante (porque había una persona que no le gustaba) y claro eso fue lo que nos faltó. Lo presentan en una cazuelita con la yema de huevo para removerlo en la mesa y después poder comerlo con las mini tostaditas. La verdad que estaba muy rico.

Como os decíamos también estuvimos dudando en pedir el Roast Beef que va acompañado de un croissant, por lo que nos parecía una propuesta diferente, pero lo dejaremos para la próxima vez.

Continuamos con otro de los principales, Choquitos en su tinta. Este fue el plato que quizás menos nos sorprendió, aunque tanto los choquitos como el arroz estaban muy bien cocinados, pero estaba un poco salado de más para nuestro gusto. Este plato lo pedimos porque íbamos a pedir uno de sus pescados que hay fuera de carta, pero cuando llegamos, y eso que no era demasiado tarde, ya no había, así que tuvimos que sustituirlo.

DULCES

Para terminar, habíamos visto que había un Coulant de Tarta de Santiago. Como no nos queríamos quedar sin él, no lo dudamos y a mitad de la cena les pedimos que nos lo reservaran. El camarero nos dijo que habíamos hecho muy bien en pedirlo y reservarlo porque volaban, literalmente. Estaba espectacular.

pampin bar santiago

Al abrirlo el interior estaba semi líquido con una crema que era parecida a comerte una Tarta de Santiago recién salida del horno. Una auténtica bomba que si nos llegan a poner 3 o 4 más, las devoramos. Increíble lo rico que estaba. Pedidlo sin duda.

Nos lo pasamos muy bien probando la propuesta de ‘Pampín Bar’. Una cocina tradicional gallega que va un poco más allá y que se mezcla con las nuevas tendencias. Perfecto para ir después de conocer Santiago y darse un buen homenaje. La única pega que le podemos poner, si cabe, es que el camero que nos tocó era de los que se hacía notar en exceso, que empezó siendo gracioso y terminó siendo un poco molesto. Por supuesto, esto no empañó, en absoluto, nuestra experiencia y lo bien que cenamos.

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Dirección: Ruela das Fontiñas, 4 (Rúa de San Pedro), 15703 Stgo. de Compostela

Teléfono: 98 111 67 84

Precio medio: 25-30€

Y aquí os dejamos la ficha resumen de nuestra visita a ‘Pampín Bar’:pampin bar valoracion


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