PUM PUM BAKERY: La panadería que fue una pizzería

El local de PUM PUM BAKERY se ha convertido en uno de los imprescindibles del barrio y de cualquiera que sea amante de la bollería y de la panadería. Su olor a bollería recién horneada traspasa las puertas del local y se esparce por toda la calle para que puedas seguir el camino.

Este obrador abrió sus puertas en un local en que por las mañanas hacían bollería casera y por las noches pizzas, en lo que ahora es Pizza Posta, unas de nuestras pizzas favoritas de Madrid. Lo cierto es que ha tenido tan buena acogida que han decido abrir este local para dedicarlo exclusivamente a ‘Pum Pum Bakery’. El nuevo local sigue un poco el estilo del anterior, de estilo industrial y con mezcla de materiales pero es mucho más amplio, muchas más mesas y más posibilidades de disfrutar de las maravillas que hacen estos chicos.

¿De dónde vienen estos chicos? Pues de un local que está muy cerca y que se llama Pum Pum Café, uno de los templos del brunch en Madrid. Los fines de semana la gente hace cola para entrar a probar una de sus tostadas o su granola casera. Pero ahora la probabilidad de poder probar lo que hacen han aumentado gracias a pum pum bakery.

Pues esto depende de lo que haya y de lo que más te guste. Puedes encontrarte con Croissants rellenos y otros sin rellenar. Sus Pain au Chocolat. Sus mornings Rolls de diferentes clases. Depende de lo que les entusiasme en ese momento. Lo mejor, es que cualquier cosa está buenísima, aunque nosotros reconocemos que nos quedamos con sus croissants. Déjate llevar y elige, en este caso, por la vista y por la pinta.

En nuestra primera visita al nuevo local probamos su Croissant clásico y un Roll de calabaza y cardamomo que estaba espectacular. Todo acompañado de un buen capuccino, preparado con el café de sus vecinos y tostadores de café Hola Coffee. No hay mejor manera para empezar el día.

Otras veces hemos probado el Croissant relleno de pistacho (foto izquierda) que se ha convertido en uno de nuestros favoritos junto con su Pain Au Chocolat (foto derecha). Cada vez que vamos tienen algún sabor diferente pero nos cuesta mucho renunciar a estos dos últimos. Todo depende del día y de lo que veamos en el mostrador.

La primera vez que estuvimos en la cafetería (en el local antiguo, que ahora es Pizza Posta) tomamos el Croissant Stick, la masa de hojaldre del croissant, pero en forma alargada y un Croissant relleno de almendra.

Tienen brunch los fines de semana. Es uno de nuestros brunch favoritos. Se empieza con un zumo de naranja recién exprimido y granola casera acompañada de yogur con trocitos de fruta. Granola que además podéis comprar en el local. Después pasamos a la parte dulce. Un croissant clásico. Por último, una tostada de aguacate y huevo poché coronada con salsa holandesa. Por supuesto, también incluye un café o un té.

Otra de las cosas que nos gusta del brunch de ‘Pum Pum Bakery’ es, además de su precio más que competitivo, 10 euros, es que puedes añadir al brunch alguna pieza extra de bollería o tostada, por lo que lo puedes convertir en un brunch para compartir.

También preparan sus propios panes y hogazas de masa madre o Focaccias elaborados principalmente con harinas ecológicas integrales como la espelta, el trigo o el centeno. Además puedes pedir unos de sus Survival Kit, una caja para rellenar de bollería y de felicidad. A más de uno le vas a alegrar la mañana si le llevas una de sus cajas.

Su nueva apertura es PARQUE CAFÉ. Esta nueva propuesta se encuentra en el Norte de Madrid, en la Calle de Victor de la Serna, 1. Un local con mucha luz y que cuenta con unas cuantas mesas en la terraza y que se encuentra a escasos pasos del Parque de Berlín. Su carta es la misma o muy parecida. Tienen sus elaboraciones del obrador, como croissants, sus famosos bastones, pain au chocolat y otras delicias. También tienen parte salada o, por ejemplo, un Brioche con creme fraiche y mermelada de frutos rojos, que es una auténtica maravilla.

También tienen la opción de comprar alguno de sus panes, brioches, granola casera o café de especialidad. El local es súper agradable y además, por lo que vimos, se han convertido en pocos meses en uno más del barrio. Mucho visitante asiduo con los que han creado ya una familia.