Pasear por las calles de Palma es uno de nuestros hobbies favoritos. Entrar por calles que no habíamos descubierto, disfrutar de su luz y de sus gentes o entrar en sus tiendas. Si a esto le añades que el paseo sea con dirección a ROSEVELVET, el disfrute es aún mayor. ‘Rosevelvet’ es una de las cafeterías de especialidad más populares de la ciudad y que, además, ahora tiene su obrador, Rosevelvet Bakery, en el que fabrica las delicias que luego podrás encontrar en su cafetería.
El local se distribuye en dos zonas. Una primera de mesas en la que al final está la barra en la que preparan sus cafés, puedes ver la bollería y salen sus platos. Pero cuidado, que el local de ‘Rosevelvet’ no acaba aquí, hay más y es uno de sus encantos, la terraza. Un patio mallorquín lleno de vegetación dispuesto con mesas en el que disfrutar de su carta al aire libre. En esta última visita, elegimos su terraza y la experiencia nos encantó.
Salvo que lleguéis según abra, en ‘Rosevelvet’ suele haber bastante gente. Nosotros no tuvimos que esperar para coger mesa, pero si es verdad que el tiempo medio de espera para la comida fue un pelín largo, pero la verdad es que estaban casi desbordados.
QUÉ TOMAR EN ROSEVELVET
Sus cafés de especialidad, su bollería, sus tartas y sus platos salados merecen que te tomes tu tiempo en hacerles una visita. Todo lo que tienen en la carta está hecho por ellos, productos frescos y de primera calidad, sin conservantes ni aditivos artificiales.
CAFÉ
Empezamos pidiendo el café (que eso siempre lo tenemos claro), antes de decidir qué pedir para comer, pedimos un Iced Latte y un Flat White, que aunque hacía bastante calor ese día, merece la pena pedirlo, porque lo preparan espectacular. El café de especialidad que estaban utilizando el día que estuvimos era de Right Side Coffee y eso siempre es buena señal.
Y para comer… Nosotros esta vez nos decantamos por todos los platos salados.
SALADO
Tienen una selección de diferentes panes, todos elaborados diariamente por ellos, que los utilizan para sus platos, donde encontrarás algunos como la «Ciabatta de remolacha» para su Veggie, el «Pan de Molde« del Bikini o el «Brioche« de su Pulled Pork con una pinta brutal.
Empezamos probando su Sándwich de Bikini. Un clásico pero que rico estos clásicos. Pan de molde, queso havarti, jamón york y mantequilla.
El otro que probamos fue su Sándwich de Pastrami. Ya lo habíamos probado la vez anterior que habíamos estado y, como nos gustó tanto, no nos pudimos resistir a pedirlo. La base es de pan rústico y el interior está formado por lonchas de pastrami, queso havarti, mostaza, chucrut, crème fraîche y pepinillos.
Echamos de menos que el pan estuviera tostado (como en nuestra anterior visita) porque habría hecho que el sándwich fuera perfecto. Aún así estaba tan rico como lo recordábamos.
Por último, probamos el Veggie. Harissa, hummus, berenjena, cebolla encurtida, jalapeños y rúcula. Aunque nos gustó el sándwich, se nos quedó un poco plano de sabor. Igual con un toque más de encurtido o picante, se hubiera solucionado.
En nuestra primera visita probamos el Poche. Una tostada con dos huevos poche, english muffin, tomate, aguacate, queso feta y dukkah (una mezcla de frutos secos y especias que tienen su origen en Egipto). Un poco más clásico pero igual de rico.
BOLLERÍA
No nos podíamos ir de ‘Rosevelvet’ sin probar alguno de sus dulces. Nos acercamos a su vitrina y nos explicaron que era cada uno y finalmente nos decimos por probar su Bizcocho Limón y Amapola. Nos gustó mucho porque estaba súper esponjoso.
Si os apetece por la mañana empezar muy bien el día, no lo dudéis. Gracias al fantástico desayuno en ‘Rosevelvet’ cogimos energía y fuerzas para lo que nos quedaba de día. Un desayuno perfecto y una cafetería perfecta para disfrutar de un buen café con una porción de tarta y pasar una muy buena tarde.
MÁS ROSEVELVET
Además, con la novedad de su obrador, ahora también se pueden llevar sus maravillas. Las tartas en dos tamaños, como la Cheescake, Brownie, tarta de zanahoria, la Cochocake o tartaletas mini. También alguno de sus panes o algo de su bollería, que lo preparan por encargo . Nos parece una opción perfecta si vas a hacer un picnic en la playa o quieres prepararte un desayuno o merienda en casa. Así que después de todo esto, sólo os podemos decir, que visita obligada.
Dirección: Carrer de Font i Monteros, 22, 07003 Palma
Teléfono: 871 70 69 46
Precio medio: 5-15€
Y aquí os dejamos la ficha resumen de nuestra visita a ‘Rosevelvet’:
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